En nuestro día a día, los espacios que habitamos, ya sea nuestro hogar, oficina o cualquier otro lugar significativo, acumulan energías que pueden influir en nuestro bienestar físico, emocional y mental. La limpieza de espacios con péndulo hebreo es una técnica avanzada de sanación energética que purifica y equilibra la energía de estos entornos, creando ambientes más saludables, armoniosos y propicios para el crecimiento personal y profesional.
Hay momentos en los que, aunque limpies tu energía, sigues sintiendo que algo se cuela. Que estás demasiado abierta, demasiado permeable, demasiado vulnerable a lo que pasa fuera. El sellado aúrico está especialmente recomendado si: > Te cuesta poner límites o sostenerlos sin culpa. > Eres muy empática y absorbes fácilmente emociones ajenas. > Sientes que "todo te afecta" y te deja agotada. > Has hecho una limpieza energética reciente y necesitas integrarla. > Estás viviendo procesos intensos (mudanzas, rupturas, duelos, cambios vitales). > Trabajas en entornos exigentes o emocionalmente cargados (terapeutas, cuidadoras, docentes, sanitarias). > Te estás exponiendo más al mundo (proyectos, redes, visibilidad) y sientes que necesitas "blindarte sin cerrarte". > Tienes una enfermedad crónica
Qué trabajamos en esta sesión
¿Cuándo necesitas limpiar
un espacio?
La energía se impregna en los lugares como el olor en la ropa. Una casa, una oficina, una habitación pueden quedarse cargadas de memorias antiguas, discusiones, duelos, miedos, resentimientos. Necesitas una limpieza de espacios si: > Has cambiado de casa y sientes que algo "no termina de encajar". > Percibes pesadez, estancamiento o incomodidad en algún rincón de tu hogar. > Han ocurrido rupturas, enfermedades, pérdidas o situaciones de alta carga emocional en el espacio. > Sientes que tu proyecto, tu vida o tu abundancia no fluyen como deberían. > Quieres iniciar un nuevo ciclo y deseas abrir el espacio a nuevas energías. Un espacio limpio es un espacio que sostiene tu renacimiento, no que arrastra tu pasado.